lunes, 12 de noviembre de 2007
Publicado por El Ángel Guardián en 8:31
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Eric Hobsbawm (1917 - ) es el historiador vivo más popular de Occidente de ideología marxista y profesor emérito de historia social y económica del Birkbeck Collage, Universidad de Londres. Entre sus numerosos libros debe destacarse Historia del siglo XX (1998, 2004) y Entrevista sobre el siglo XXI (2000). Hobsbawm analiza con rigor intelectual y ameno estilo las tendencias del siglo XX para aventurarse a “predecir” cómo continuará la historia en el nuevo milenio. Hobsbawm ha escrito libros acerca de las revoluciones del siglo diecinueve, sobre la historia del siglo veinte y ahora realiza predicciones del siglo veintiuno y, a su longeva edad, ha visto infinidad de hechos históricos importantes tales como los totalitarismos, el colonialismo y la descolonización, el socialismo real, el derrumbe del comunismo soviético, la proliferación de los efectos de la globalización y también sus desventajas y el terrorismo político. Hobsbawm también ha escrito sobre el barbarismo en la edad moderna, los problemas del movimiento obrero y el conflicto entre anarquismo y comunismo.
Después de leer Guerra y Paz en el Siglo XXI de Eric Hobsbawm he querido de alguna manera identificar los objetivos del autor y trabajar sobre ellos sopesándolos documentándome con más obras o entrevistas realizadas al autor con la, quizás, finalidad de poder observar la manera de pensar de Hobsbawm y si su visión sobre la historia había evolucionado o no después de la innumerabilidad de cambios que se producen a diario en muchos campos y no tan sólo en el plano “académico”.
Estados Unidos procuró la desaparición del Imperio Británico y siempre ha sido expansionista. Ejerce un control gracias a su poder militar y sus decisiones en el Consejo de Seguridad veta las acciones de
Los únicos enemigos de EEUU son los que rechazan su modelo de vida. En el mundo hay decenas de conflictos declarados y otros que también están ocultos, ¿quién puede hacerse cargo o quién puede ofrecer apoyo en todos ellos? No un estado-nación cualquiera, debido al colapso del equilibrio de poder internacional a partir de la segunda guerra mundial… sino una superpotencia, de la cual el autor piensa que debiera corregir su manera de actuar calificándola de mediocre o utopista. El final de
Por último suscita si es viable la democracia, en qué consiste, y si la democracia es un sistema (la democracia liberal) que realmente esté dando resultados. Hobsbawm entiende que la democracia es el sistema de gobierno más extendido y que puede procurar el mayor bienestar público. Hobsbawm encuentra que los dos grandes problemas de la democracia son el capitalismo bajo la influencia de la globalización y por otro lado el aumento de la abstención política. “El pueblo no es capaz de juzgar los proyectos sino los resultados (…)”. El laissez faire ha fracasado y por lo tanto los estados-nación continuarán teniendo el control mejorando así la continuidad de las democracias. Excepcionalmente acaba el capítulo La difusión de
Otro punto en el que estoy de acuerdo es en el hecho de que los ciudadanos ya no dependen tanto del Estado, puesto que ellos mismos pueden optar por no querer morir o matar por deber a su país, como si les ocurriera en las guerras mundiales. El poder de los Estados se ha debilitado y más cuando se ha dejado llevar por retóricas políticas que en vez de “ayudar a mantener el orden público”, provocan pánico en la sociedad. Sin embargo, siempre quedará gente como Michael Moore que nos revele “una verdad a medias” sobre lo que ocurre dentro del país más poderoso del momento, donde se obligó a la gente a participar en la guerra de Irak.
Guerra y Paz en el Siglo XXI de Eric Hobsbawm es sin lugar a dudas una gran obra enfocada desde una perspectiva comunista. Demuestra su parecer personal acerca de la ideología megalómana de Estados Unidos, los efectos de la globalización (que aporta bastantes desventajas a tener en cuenta) y de la xenofobia y racismo que conllevan al extremismo ideológico y el terrorismo, así como la violencia y la contraviolencia y la viabilidad de la democracia; también aprovechando el gamberrismo en el fútbol así como las leyes del mercado para ejemplificar mediante temas actuales y no tan “conceptuales” la verdadera realidad del nuevo milenio. En conclusión, y desde el inicio desde una posición crítica, nos habla de que el siglo XXI no será un siglo de paz, pero que al menos no será tan “catastrófico” como el siglo anterior. Asimismo nos aporta los pilares sobre los que se sostendrá, según su opinión, el mundo y mantiene una posición escéptica hacia la posibilidad de una comunidad internacional. Para Hobsbawm términos como pueblo y populismo son conceptos poco concretos y es por eso que está enfrentado a las ideas de Toni Negri, otro filósofo y pensador marxista italiano contemporáneo, y aboga por un pueblo que verdaderamente esté unido.
Algunas cuestiones no mencionadas tan ampliamente son: La vital importancia de qué ocurrirá cuando mengüen o desaparezcan los recursos de los que disponemos hoy en día. Éste si podría ser un motivo de una guerra, una gran guerra, global y no por motivos ideológicos como las antiguas cruzadas. Echo de menos también una explicación más detallada sobre el islamismo, el peso de los medios de comunicación, etc. También me doy cuenta que no ha tenido en cuenta la manera en que la política encaminará sus proyectos en vitales acontecimientos como el calentamiento global, y de por qué cada vez hay más diferencias entre los movimientos nacionalistas y los países que no apoyan el separatismo como una vía económica rentable como el caso de España. Tampoco ha hecho hincapié en las consecuencias del crecimiento económico de India y China, o el desarmamiento de Corea… así como al fin del apogeo comunista en Cuba. Sin embargo, podría enumerar infinidad de temas, pero no todos tienen vital importancia para un tema como el de Guerra y Paz en el Siglo XXI.
Esta obra es el resultado de la jornada celebrada el 28 de octubre de 2005 sobre el tema de Los desafíos actuales a la seguridad en
La inician los propios editores con una introducción Los desafíos actuales a la seguridad en
A continuación tratan el nuevo terrorismo internacional. Dicen de él que además de poner en evidencia los valores, libertades y derechos y la vida de las personas (cada vez mayor el número), que es equivocado el desafío de la guerra contra el terrorismo, sobretodo en el caso de Estados Unidos. Las ADM son obviamente, una amenaza real, pero ni es la única, desde luego, la más importante. Y esto sería así aunque se le añadiera el terrorismo internacional. No hay constancia de que ningún grupo terrorista internacional haya podido hacerse con capacidades nucleares, químicas o biológicas. El Consejo de Seguridad se mantiene firme en su resolución 1540 (2004) acerca de las obligaciones jurídicas internacionales para todos los Estados en el caso del apoyo al terrorismo y a las armas de destrucción masiva. Asimismo también
La delincuencia organizada transnacional es otra de las nuevas amenazas que atentan contra la seguridad de las personas, de los Estados y aun de
Los denominados Estados fracasados, según O. Casanovas, son “tanto aquellos Estados en los que la organización política ha desaparecido y se han convertido en un escenario de lucha entre grupos y fracciones, como los Estados en los que un poder tiránico tiene sometida a la población a violaciones masivas de los derechos humanos más fundamentales. Alteran los fundamentos de
Otros problemas son la pobreza, el incremento de las desigualdades entre determinados grupos de personas y entre Estados, el deterioro progresivo del medio ambiente y el riesgo de que la propagación de determinadas enfermedades infecciosas acabe propagando una pandemia de alcance mundial, y también las desigualdades étnicas y religiosas. Todo esto conlleva la aparición de migraciones extremas.
El nuevo contexto de las relaciones internacionales ha supuesto el desbloqueo del funcionamiento del Consejo de Seguridad y la revitalización del sistema de seguridad colectiva previsto en el capítulo VII de
En este sentido, los editores defienden una seguridad comprometida con las necesidades básicas de las personas y las comunidades. Buscan ver el lado positivo de
El libro queda estructurado en cinco partes y una última para consideraciones finales. Seguiré el mismo esquema que el libro original para resumir mi trabajo. A continuación realizaré una valoración personal sobre la obra y un punto de vista contradictorio si lo encontrara.
Según el parecer de Xavier Batalla, corresponsal diplomático de
Al parecer de Joseph S. Nye el poder se mueve en tres niveles: el militar, el económico y el nivel en el que los agentes no estatales mueven sus piezas. Estados Unidos vence militarmente. Económicamente, tiene competidores en Europa, Japón, China… es multipolar. Y en el último poder junto al terrorismo u otros factores el poder es disperso. Nye habla en el siglo XXI de un sistema unipolar donde una superpotencia puede oponerse con éxito a una combinación de potencias, pero al mismo tiempo, necesita de la cooperación de otros estados, como se demostró en Irak. La postura neoconservadora dice que Estados Unidos es harto suficiente y que no necesita de ayuda externa.
Entre los realistas hay posiciones encontradas sobre la viabilidad del presente sistema unipolar. Hay realistas que sugieren que mientras Estados Unidos se comporte como un poder benigno, el sistema unipolar continuará, ya que sus eventuales competidores no lo considerarán una amenaza. Otros realistas consideran que todo sistema internacional inevitablemente está condenado a deslizarse hacia el equilibrio por lo que se muestran convencidos de que un orden unipolar es el más inestable e inseguro de todos los posibles. Barnett mediante la teoría de globalización a través del ejemplo de la guerra de Irak y el derrocamiento de Saddam Hussein, establece que existen para Estados Unidos países que están en el núcleo y países en el agujero y que todo se basa en la democratización y en la validez a sus intereses globales. El escenario para Barnett es unipolar.
Si los aliados de Estados Unidos lo arrinconaran su liderazgo sería cada vez menos deseable. Pero Washington parece responder bien a la seguridad por su capacidad estratégica para poder defender el mundo, aunque deba servirse del multilateralismo, aún a sabiendas que lo enfrente a China. El problema con el poder estadounidense no es que sea estadounidense sino que es un poder y muy fuerte.
Según Caterina García Segura, profesora titular de Derecho internacional público y Relaciones internacionales en
Objeta breves comentarios sobre cuál es la postura mejor si el multilateralismo o el unilateralismo de cara a Estados Unidos y los países de Occidente y el uso de la fuerza, haciendo referencia al cambio más notable con la renuncia al uso de la misma en las relaciones internacionales recogido por primera vez en el Pacto Briand-Kellog, consolidado y extendido universalmente en
Para ser funcional, el orden debería contemplar, además de la existencia de Estados, la de individuos que se agrupan en Estados pero también en otro tipo de formaciones y en base a solidaridades diferentes a las estatales. Algunas de las instituciones han quedado obsoletas para resolver la problemática internacional debido a que no se encontraban presentes cuando aparecieron las nuevas amenazas internacionales. El funcionamiento del orden pone en evidencia la existencia de una brecha entre la responsabilidad y la capacidad de decisión de los Estados en la sociedad internacional.
Los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001 no fueron la causa pero sí el detonador y la justificación política del giro de la política exterior de los Estados Unidos que amenaza a los fundamentos del orden internacional porque propone romper con el principio organizador, la soberanía estatal, imponiendo conceptos que lo invalidan como la soberanía limitada o condicionada e introduce prácticas como la defensa anticipada o el unilateralismo, que son contrarias a las elaboradas de forma gradual y consensuada desde 1945.
La transformación del orden internacional es la única salida para que, a medio o largo plazo, recupere su función estabilizadora y proveedora de seguridad, de una seguridad no únicamente estatal sino humana y sistemática. Se necesitaría el restablecimiento del compromiso con el multilateralismo, como mecanismo de gestión política de los problemas internacionales encarnado en la institución de las Naciones Unidas y el abandono del rol subversor del orden por parte la superpotencia hegemónica. El nuevo orden global debería ampliar las bases del consenso en una dirección transnacional y cosmopolita que capte el sentido del mundo y de la ausencia de fronteras en el contexto de la globalización, que aprehenda la existencia de lealtades múltiples, el aumento de los vínculos transnacionales, el ascenso de los actores políticos no estatales y recupere el significado de los vínculos democráticos.
Un orden internacional renovado ha de asumir las transformaciones de la soberanía estatal y la relevancia de las autoridades no estatales y ha de compatibilizar seguridad estatal y seguridad humana. La conquista de la libertad siempre requiere actividad mientras que la inactividad aumenta el peligro. La sociedad internacional puede resistir un proceso de renovación del orden que sea lento, pero necesita con premura frenar el proyecto imperial para que ese proceso pueda empezar su andadura.
Según Pablo Pareja Alcaraz, Profesor de Derecho internacional público y Relaciones internacionales en
El nuevo terrorismo se caracteriza por ser entidades relativamente amorfas, con estructuras menos cohesionadas que en décadas anteriores y con un contingente de activistas más difuso. Se mueve a través, por ejemplo Al Qaeda, de asociaciones políticas, agrupaciones religiosas, organizaciones no gubernamentales, aparatos clandestinos y empresas. Y los terroristas pertenecen a países en vías de desarrollo y países ricos, por igual. Los agentes del nuevo terrorismo están dispuestos a sacrificar su vida si con ello sus actividades alcanzan mayores cotas de destrucción y ganan visibilidad. Erróneamente se asocia el terrorismo al enfrentamiento teocrático y no es así, pues no es igual terrorismo a Islam, como vemos en atentados como el de Madrid, Bali o Londres. Son figuras como la de Osama Bin Laden la que propugnan la yihad y enriquecen el choque entre civilizaciones.
El terrorismo ha florecido gracias a la aparición de la revolución científico-tecnológica y el aumento de las vías de comunicación y el progreso de la globalización; por el apoyo prestado por los Estados que directa o indirectamente han apoyado su ascenso o no han sabido controlar su establecimiento dentro de sus fronteras; por la desigualdad global en el mundo… El fracaso de numerosos proyectos políticos moderados en el mundo árabe ha favorecido en las últimas décadas la emergencia de movimientos revisionistas que postulan el retorno al fundamentalismo islámico y el ascenso de líderes radicales que auspician, financian y legitiman con su discurso la puesta en marcha de actividades terroristas dirigidas contra los intereses de Occidente.
El nuevo terrorismo internacional obliga a los Estados a superar el fuerte unilateralismo que, durante décadas, ha presidido sus respuestas a las amenazas y los retos asociados con la seguridad de la comunidad internacional. El nuevo terrorismo exige, además, la aceptación y promoción por parte de los Estados de la participación de otros actores internacionales en el ámbito de la seguridad. Para ello, la institución del multilateralismo debe contar con la ayuda de actores internacionales como las empresas multinacionales o las organizaciones no gubernamentales.
También sugiere el autor que es un error lo ocurrido en Afganistán e Irak y que hay que buscar métodos alternativos para poder acabar con el terrorismo internacional sin el recurrir a la fuerza y la supresión de derechos y libertades. Este terrorismo sólo se puede comprender y afrontar con ciertas garantías de éxito si se acepta que esta nueva amenaza a la seguridad internacional, coexiste y actúa en conjunto con otros retos y desafíos de la seguridad de la comunidad internacional.
Al parecer de Jesús A. Núñez Villaverde, Co-director del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria, en Las Armas de Destrucción Masiva, una amenaza vigente, ve que las ADM son un gran instrumento de poder que en manos de las potencias oficiales o las no oficiales siguen un juego de disuasión en las que no las usarán a menos que sean el último recurso, mas ¿qué ocurre con Irán o Al Qaeda por ejemplo? El mundo teme las ADM como lo que más, y por eso el ataque contra Irak en busca de las armas de destrucción masiva fue más que justificado por algunos.
En contra de las evidencias, se prefirió creer que cuantas más armas se poseyera, mayor sería el grado de seguridad alcanzado; sin entender que ese principio alimentaba incesantemente la inseguridad de los vecinos y, en consecuencia, su búsqueda de seguridad a través de la misma vía. Si esto era válido para las armas convencionales, también para las nucleares.
Estados Unidos ha vuelto a la época del escudo de misiles, a apostar por la mejora de los mecanismos normativos de no proliferación y a considerar las armas nucleares como un arsenal a ser usado en diferentes fases de la batalla y no como último recurso. Sin embargo, para el 2007 habrá de tener tan sólo unas 3800 cabezas nucleares.
Por último hay que tener en cuenta nueve consideraciones. La primera: que Corea del Norte se ha añadido a la lista de potencias nucleares y al lanzamiento de misiles e inspirará en esta carrera próximamente a Irán; la segunda: ningún grupo terrorista se ha hecho con un arma de capacidades nucleares, químicas o biológicas; la tercera: las empresas están envueltas en el desarrollo el átomo y por tanto son colaboradoras del progreso nuclear; la cuarta: no hay cuarenta Estados como se previó hace tiempo sino nueve en posesión de armas nucleares; la quinta: el Consejo de Seguridad está formado por las potencias oficiales que tienen las armas nucleares; la sexta:
En la intervención sobre Los Estados fracasados que ofrece Oriol Casanovas y
Según José García Montalvo, Catedrático de Economía y Empresa en
En el estudio de las causas de los conflictos, desde la perspectiva empírica, existen básicamente dos aproximaciones. Desde la ciencia política se postulan generalmente explicaciones basadas en los agravios que sufren determinados grupos sociales. Desde la ciencia económica la aproximación se basa en dar mayor importancia a las oportunidades, la ventaja y la codicia.
En el grupo de los agravios se incluyen normalmente tres factores: el odio religioso y étnico, la exclusión política y la desigualdad económica. Es lo que se llama índice de fraccionalización, que mide cuál es la probabilidad que sacando dos individuos de un país al azar los mismos pertenezcan a dos grupos religiosos o étnicos diferentes; mientras que la polarización mide que las sociedades más conflictivas son aquéllas donde hay un grupo étnico mayoritario y una minoría étnica proporcionalmente grande.
Otro elemento importante son los factores de oportunidad: la capacidad de financiación del gobierno y los rebeldes, el coste de la rebelión, la cohesión social y el tamaño de la población. La financiación se basará en los recursos naturales del país, los recursos de los exiliados y las subvenciones de los gobiernos hostiles. La facilidad para conseguir el armamento también es un factor importante para aumentar las posibilidades de que nazca un conflicto. La dispersión de la población también dificulta el control militar por parte del gobierno, con el nuevo reclutamiento y su funcionamiento más disperso.
Los estudios empíricos no encuentran evidencia de que la desigualdad económica o la exclusión política tengan importancia a la hora de explicar la probabilidad de que se produzca un conflicto armado. El nivel de democracia de un país tampoco está relacionado con la probabilidad de conflicto; por el contrario las democracias débiles o nacientes tienen mayor probabilidad de sufrir un conflicto armado. Los recursos naturales, que en principio parecen un candidato razonable para explicar la probabilidad de explicar la probabilidad de conflictos armados no tienen un efecto significativo en términos significativos. El efecto de la renta per cápita del país es débil; cuanto mayor es le nivel de renta inicial menor es la probabilidad de que se produzca un conflicto armado. Respecto a la heterogeneidad social no se encuentra un efecto estadístico asociado a la fraccionalización étnica. Sin embargo la polarización sí que indica un nivel alto para que se produzca un conflicto armado. Otro factor que lleva a conflictos armados es la desigualdad económica aún con la ayuda exterior, puesto que los gobiernos corruptos se quedan con dichas ayudas.
El grado de democratización de un país tiene un efecto no lineal por lo que las llamadas a la democratización de los países en vías de desarrollo pueden tener, al menos inicialmente, un efecto contrario al perseguido. La ayuda al desarrollo, como medida de prevención de los conflictos armados tendente a aumentar el nivel de renta per capita de los países, se ha mostrado altamente ineficaz para conseguir este objetivo intermedio. Por tanto, es difícil que pueda ser realmente un mecanismo de protección contra el comienzo de un conflicto. Por el contrario, nuevas iniciativas como la teoría de la deuda odiosa o la división administrativa de los países basada en dimensiones étnicas tiene potencialmente un efecto preventivo interesante.
En la opinión de Rafael Grasa, Profesor de Relaciones Internacionales y secretario general del a Universidad Autónoma de Barcelona, en La protección del Medio Ambiente y la seguridad medioambiental y la especificad de los conflictos medioambientales: son sólo conflictos sociales y políticos, el medio ambiente y la seguridad están interconectados, tal y como se puede ver en el ejemplo de Kyoto y el cambio climático, con la creciente politización, internacionalización y seguridad.
No hay evidencia empírica clara para afirmar que los factores medioambientales sean causa suficiente y per se para explicar el surgimiento de la violencia en un conflicto, aunque sí resulta evidente y contrastado que pueden ser una causa necesaria o por lo menos complementaria en muchos casos.
Los conflictos ambientales como conflictos sociales dan lugar a tres características:
a) Son temas de debate y de preocupación pública, con creciente presencia en las agendas políticas y sociales.
b) Son problemas que planten cuestiones de gobernabilidad y gobernación, así como de acción colectiva.
c) Son multidimensionales, dado que, en la esfera nacional, y en a internacional, las cuestiones relativas al medio ambiente se vinculan a las de desarrollo. El resultado es que ambas problemáticas presentan siempre dimensiones económicas, sociales, políticas, y ecológicas entrelazadas aunque en cada caso y momento predomine una u otra.
Según Paz Andrés de Santa María, Catedrática de Derecho internacional público y Relaciones internacionales en
Un principio de derecho internacional bien establecido dice que “el Estado amenazado puede recurrir a la acción militar siempre que la amenaza de agresión sea inminente, no haya otro medio de impedirla y la acción sea proporcional”. También existe el caso de que cuando se han recibido varios ataques puedas “prevenir” el ataque mediante la legítima defensa para evitar una amenaza inminente o próxima.
“El Consejo de Seguridad tiene plenas facultades en virtud del Capítulo VII de
El uso de la fuerza debería tenerse en cuenta según cinco principios: gravedad, propósito correcto, último recurso, proporcionalidad de los medios y balance de las consecuencias. La cuestión es, ¿a quién corresponde “el uso de la fuerza militar”?
Otro aspecto es la “responsabilidad de proteger” en casos de genocidios, depuraciones étnicas y otras violaciones graves y masivas de los derechos fundamentales y humanos, cuando los gobiernos no quieren o no pueden asumir esa obligación… ¿quién debe actuar? El Consejo de Seguridad. Sin embargo, siempre o casi siempre ha llegado con lentitud o con demasiada vacilación o directamente no ha hecho nada.
Por lo tanto, dos tareas que quedan pendientes son: reafirmar la vigencia de
En la opinión de Silvia Morgades, Profesora de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de
Los métodos de tortura son percibidos como válidos para obtener información, la violación de la integridad física y psicológica se utilizan para mermar la moral del enemigo o bien la detención indefinida de personas sin juicio ni autorización judicial y sin el beneficio del estatuto de prisioneros de guerra es considerada un conjunto de acciones legítimas en el contexto en que se producen.
Cuando las reglas que rigen la protección de las personas no son respetadas o cuando ha habido víctimas inevitables y el estado no puede o no quiere prestar asistencia a la población, se considera que la responsabilidad de asegurar la supervivencia de las víctimas de los conflictos y, por lo tanto, de asistirlas, recae o incluso vuelve a la comunidad internacional. Para ello se necesitan las actividades humanitarias como las de
Los retos actuales de la acción humanitaria son: en primer lugar, garantizar que los diferentes actores de la comunidad internacional que están en disposición de prestar asistencia tengan acceso a las víctimas de los conflictos, sobre todo cuando el alcance y la urgencia de las necesidades humanitarias no permite aplazarla en función de decisiones soberanas que no tienen como prioridad la protección de las personas; en segundo lugar, preservar la seguridad del as acciones de la asistencia humanitaria y de los agentes humanitarios, en el contexto de los conflictos asimétricos y de terrorismo internacional; y en tercer lugar, asegurar tanto la coordinación de las acciones humanitarias de los diferentes agentes, para evitar duplicaciones y lagunas, como la transición entre las acciones de urgencia y el restablecimiento de las condiciones básicas para el desarrollo y la emancipación social de las comunidades.
Mucho personal humanitario arriesga su vida cada día cayendo en el frente puesto que las fracciones desconfían de la ayuda ya que piensan que son parte de la planificación de la estructuración occidental y mueren a cientos. Sin embargo, no se hace distinción, por la neutralidad y se presta ayuda por igual a amigo que a enemigo.
Concluye con que van de la mano el respeto por los derechos humanos y el respeto por el derecho humanitario. Recuerda que debe reforzarse el respeto por tratados como los Convenios de Ginebra y el asilo a las víctimas. Destaca el papel de los Estados en la “responsabilidad de proteger” y recuerda la intervención de las organizaciones no gubernamentales e internacionales como
En la intervención de Albert Garrido, Profesor de Periodismo en
Los periodistas sólo pueden dar crédito de lo que presencian en directo, casi siempre una parte más reducida que los acontecimientos. Los combatientes suministran versiones interesadas de los hechos y llevan hasta sus últimas consecuencias las técnicas de la intoxicación informativa. La comprobación de los hechos más allá del campo de visión de los periodistas es un trabajo a menudo imposible. Una parte de los hechos es celosamente ocultada por los mismos combatientes y muchos medios son herramientas que están asimismo a disposición de los combatientes para diluir de los hechos. Luego no es nada fiable o veraz del todo, o del todo objetivo lo que se está transmitiendo. Siempre está viciado.
Se citan ejemplos sobre el New York Times y The Washington Post viciando información sobre la guerra de Irak y apoyando fervientemente antes de la guerra con calumnias a la población estadounidense. Y de cómo la agencia de inteligencia
Según Mary Kaldor, Profesora de
Añade la aparición de los desastres naturales, las enfermedades pandémicas, la desigualdad económica, la pobreza, el hambre y otros conflictos sociales que no están en el primer plano de los Estados a la hora de resolver los problemas de la seguridad internacional. Habla sobre la peligrosidad del terrorismo internacional en la escala que sea con el tipo de arma cualquiera y del rechazo cada vez mayor de los derechos humanos por parte de los Estados más poderosos. Basta de fuerza militar para resolver conflictos, lo primordial no son los Estados, sino las personas, la seguridad humana.
Se necesita la combinación de soldados, miembros de policía, controladores de los derechos humanos y especialistas en desarrollo humanitario que puedan ser útiles de varias maneras a partir de combinaciones diferentes y en diferentes partes del mundo. Ésta fue una propuesta de
Por encima de todo hay que respetar los derechos humanos, pero a veces hay que utilizar la fuerza coercitiva para poder poner fin a la tiranía en el mundo y salir victoriosos, remitiéndonos a los Estados fracasados. Otro aspecto sería las víctimas de dichos conflictos a las que se les guardaría un especial orden de atención. Un tercer aspecto sería la economía para garantizar la vida y el bienestar de la persona humana individual y el establecimiento de la autoridad política conjuntamente con el multilateralismo. Un cuarto factor sería saber qué hacer, y una manera es preguntando a las mujeres pues son las que mejor saben de las necesidades sociales. Un quinto y último principio sería el enfoque regional.
Por último alude a lo ocurrido en la guerra de Irak y lo acontecido a raíz de las actuaciones de los militares angloamericanos. Concluye que las fuerzas inglesas y americanas debería retirarse, puesto que gran parte de la violencia está dirigida contra las fuerzas de coalición aunque las víctimas son civiles porqué no están protegido. Todo se extiende a guerra interminable civil entre shíis y sunís.
En la opinión de Josep Joan Moreso, Catedrático de Filosofía del Derecho de
Aborda sin precedentes el caso de Guantánamo y el caso de las detenciones ilegales por parte de Estados Unidos y el trato violatorio del estatuto de los prisioneros fuera de su jurisdicción. Sin embargo, el caso también se repite en Londres y tampoco se resuelve nada en concreto aún cuando se violan principios de
Los tribunales más altos de los países más implicados en la lucha contra el terrorismo internacional de Al-Qaeda no están dispuestas a dejar que sus gobiernos, ni sus parlamentos, se atribuyan zonas opacas de ejercicio del poder, zonas no controlables judicialmente. Haciéndolo, preservan la libertad y la dignidad de todos. Haciéndolo, evitan que caigamos en la tiranía, porque la tiranía es precisamente el ejercicios denudo del poder, el ejercicio del poder sin sujeciones. Preservar el frágil aparato del Estado de Derecho para proteger los derechos fundamentales de todos es condición necesaria para construir un mundo mejor.
Al parecer de Francisco Fernández Buey, Catedrático de Filosofía Moral en
Primero empieza con la desterritorialización del Poder. Después la pérdida del poder de actuación y decisión de los estados nacionales. A continuación es la presión constante del Estado sobre la sociedad civil para su articulación dependiente. En adelante es el proceso acelerado de homogeneización cultural como consecuencia de la globalización neoliberal.
El nuevo poder desnudo se mueve en tres posiciones: la justificación indirecta de la tortura, la justificación directa de la limitación de derechos y libertades en nombre de la seguridad por parte de los principales Estados y la justificación tácita de algo que hace sólo cuatro décadas, en un mundo bipolar, era motivo de escándalo para cualquier liberal digno de ese nombre a saber: la soberanía limitada.
Por arriba, el poder desnudo de nuestro tiempo ha cristalizado en la ideología de la “guerra entre civilizaciones”, que es tal vez la ideología más anti-ilustrada que hemos conocido desde el siglo XVIII. Tanto que, con razón, se ha dicho que más bien habría que hablar de guerra entre barbaries. Esta ideología se difunde a todas horas y, a pesar de su trivialidad, lo cierto es que desde
En la comparecencia de Ángel J. Rodrigo Hernández, Profesor de Derecho internacional público y Relaciones internacionales en
Realiza una valoración sobre el papel de Estados Unidos en el mundo y aún así ve su insuficiencia ante las amenazas del mundo, puesto que el ataque sobre un Estado es un ataque sobre todos, incluso sobre el más poderoso; aún cuando cuente con el ejercicio extraterritorial de la jurisdicción, la concepción de la legítima defensa preventiva, el trato dado a los prisioneros de guerra, su influencia determinante en algunas Organizaciones internacionales, su posición respecto a tratados internacionales multilaterales de naturales casi legislativa, su abrumadora influencia militar, económica, política e ideológica, etc. Estados Unidos modula el Derecho Internacional a su antojo para proclamar su hegemonía y hacer uso así de su capacidad legislativa y jurisdiccional selectiva mediante la preferencia por determinados procedimientos de creación de normas jurídicas y modalidades de normatividad y la utilización e invocación selectiva de normas e instituciones en aquellos ámbitos materiales que puedan contribuir a proclamar su hegemonía en el mundo.
Algunos de los principios y normas básicas que están siendo objeto de esta reinterpretación, en la que colabora
Según una intervención del presidente G. W. Bush la soberanía sería condicionada al respeto de unos determinados valores que se declaran como universales y de un modelo concreto de Estado basado en la primacía del Derecho, la separación de poderes, la igualdad social y de género, la tolerancia étnica y religiosa y el respeto a la propiedad privada. Sin embargo, usan la fuerza en “legítima defensa” contra aquéllos que consideran están en el “eje del mal” destruyéndolos o atacándolos mediante protocolos en Organizaciones internacionales. De este modo parece que el único Estado verdaderamente soberano es Estados Unidos. Estados Unidos no repara en el uso de la fuerza para defenderse de los ataques terroristas internacionales u otros. Además ha cambiado radicalmente el trato del estatuto de los prisioneros de guerra saltándose el protocolo de
El Derecho Internacional hegemónico que intenta modular Estados Unidos se caracteriza a la vez por una gran desconfianza hacia los tratados internacionales multilaterales y por la preferencia por los tratados bilaterales. En la fase de negociación, Estados Unidos utiliza su enorme capacidad para influir en los demás Estados negociadores para que el contenido del tratado regule y proteja los intereses americanos. De no ser así, no ratifica el tratado. Así lo ha hecho por ejemplo, con el Protocolo de Kyoto o el Estatuto de Roma de
La aparición de la costumbre hegemónica es utilizada por Estados Unidos para argumentar jurídicamente determinadas prácticas que permiten una ampliación del uso de la fuerza, junto a la legítima defensa preventiva. Estados Unidos se convirtió a partir de 1945 en uno de los miembros de las Organizaciones internacionales de ámbito universal más relevantes para vertebrar el orden internacional y ahora es una superpotencia. Sin embargo, ahora debe pagar tanto poder valiéndose de instrumentos multilaterales como el servicio y apoyo de
Una primera manifestación de hegemonía institucionalizada es la adopción de normas generales que responden a los intereses comerciales de Estados Unidos y de otros países desarrollados como ha ocurrido en el sistema multilateral del comercio, que al acuerdo básico, el GATT, se han unido cada vez más tratados multilaterales que regulan nuevas materias que se explican por el interés de tales Estados. En segundo lugar, la hegemonía institucionalizada puede operar mediante el establecimiento de condiciones especiales para los Estados en vías de desarrollo para la obtención de préstamos, ayuda financiera o reducción de deuda como son la condicionalidad ambiental… y ser un modelo de Estado caracterizado por la separación de poderes, democracia, y buena gobernanza. Y en tercer lugar, la hegemonía institucionalizada se ejerce por medio del reforzamiento institucional del régimen en cuestión.
Estados Unidos ha instrumentalizado a las organizaciones competentes en la materia par que le ayuden a conseguir sus propósitos. El caso de
El Derecho internacional hegemónico es un Derecho internacional instrumentalizado y sin autonomía respecto al poder. Da preferencia a los Estados más poderosos e instrumentaliza las instituciones multilaterales al servicio del hegemón. Hace difusas las amenazas y hace vulnerable
Los editores, Caterina García y Ángel J. Rodrigo, vuelven a tomar las riendas de la obra con las conclusiones finales en el capítulo titulado La necesidad de redefinir la seguridad: seguridad humana, seguridad colectiva y derecho internacional.
Primero abordan la seguridad humana. Citan dos tipos de amenazas, las mayores de origen externo y las cotidianas de origen interno. Entre las primeras se citan el conflicto violento, las pandemias, los desastres naturales, las crisis económicas y el deterioro medioambiental. Entre las segundas, las enfermedades endémicas, los daños y accidentes, la violencia cotidiana, la exclusión social, las condiciones de vida no saludables, el envejecimiento y el hambre a causa de las condiciones meteorológicas.
Según el Informe sobre el Desarrollo humano del PNUD de 1994, se citan cuatro características esenciales para definir la seguridad humana: universalidad, la interdependencia de sus componentes, la utilidad de la prevención como mecanismo para garantizarla y el estar centrada en el ser humano. Según el PNUD, la seguridad humana se compone de siete valores a proteger: la seguridad económica, la alimentaria, la seguridad sanitaria, la medioambiental, la personal, la comunitaria, y la política. La problemática está en el crecimiento descontrolado de la población, la disparidad de oportunidades económicas, la migración internacional excesiva, la producción y tráfico de estupefacientes y e terrorismo internacional.
La soberanía del Estado implicad una serie de responsabilidades, de entre las cuales la primera es la de proteger a los ciudadanos, y cuando una población sufre serios daños, el principio de no intervención cede ante la responsabilidad internacional de proteger. Otra de las potencialidades consiste en unir políticamente las agendas de seguridad y desarrollo asumiendo su realidad interdependiente y global y abriendo la puerta a la solución de los problemas estructurales de los que numerosos conflictos son el resultado.
Después continúan con el concepto de seguridad colectiva. La concepción tradicional de seguridad colectiva tenía como objetivo el proporcionar seguridad a los Estados pero, como señala el Grupo de Alto Nivel sobre las amenazas, los desafíos y el cambio en su informe Un mundo más seguro, “cualquier suceso o proceso que cause muertes en gran escala o una reducción masiva de las oportunidades de vida y que socave el papel del Estado como unidad básica del sistema internacional constituye una amenaza a la seguridad internacional”.
El Consejo de Seguridad ha ampliado la interpretación de la noción de amenaza para la paz y seguridad internacionales para poder adoptar medidas para hacer frente a las nuevas amenazas que no tienen ya un carácter estrictamente interestatal y para la protección de valores como la democracia, la vida y la integridad física de las personas incluso respecto al propio Estado del que son nacionales. Ha adoptado más resoluciones que nunca y ha incrementado su eficacia y su relevancia política y jurídica. Pero también ha sido instrumentalizado unilateralmente en diversas ocasiones por los Estados más poderosos.
Habla a continuación del uso de la fuerza como medio de protección ante el terrorismo transnacional y los ataques armados que desencadena globalmente. Las excepciones y las autorizaciones del Consejo de Seguridad, asimismo como las resoluciones fijadas por éste, para asegurar el mundo con la mayor precisión posible mediante la legítima defensa y la defensa preventiva ante los ataques mayores.
El Consejo de Seguridad modificó el diseño, elaboración y aplicación de las sanciones generales para convertirlas en sanciones más pequeñas y mejor dirigidas. Las denominadas sanciones selectivas se caracterizan por la reducción del ámbito subjetivo de afectados y por la reducción de su ámbito material, de forma que se imponen sólo sobre aquellas materias que pueden causar un perjuicio grave a sus destinatarios y modificar su comportamiento. Además, para evitar los perjuicios a la población civil prevén excepciones humanitarias que, al menos, no agravan la seguridad humana de la mayoría de las personas del Estado destinatario de las sanciones.
Cabe destacar el informe La responsabilidad de proteger en el que
Hace falta “un sistema multilateral eficaz, en consonancia con el Derecho internacional” donde “la seguridad colectiva dependa de que exista una cooperación eficaz, acorde con el Derecho Internacional, contra las amenazas trasnacionales”. Así lo compartió Kofi Annan, ex Secretario General de las Naciones Unidas.
La seguridad humana ha de estar basada en un Derecho internacional que pueda ser concebido y percibido como el ordenamiento jurídico de
En primer lugar, el objetivo de la seguridad humana ha de ser incorporado y desarrollado por medio de políticas internacionales formalizadas jurídicamente en normas e instituciones internacionales cuyo contenido y competencias dependerá de las negociaciones entre los miembros de
Y aquí acaba el resumen de la obra presentada para realizar el trabajo de Derecho internacional público II. A continuación realizo unas conclusiones particulares, una opinión personal sobre la obra (que creo servirá como posición a favor o en contra de lo postulado por los autores de la misma), y finalizará mi práctica.
a) Estados Unidos ha instrumentalizado el Consejo de Seguridad así como se ha servido de su posición relevante en diferentes Organizaciones internacionales para preservar su posición hegemónica en el mundo. Como Estado más poderoso “conserva el derecho de usar la fuerza” para defender los Derechos humanos unilateralmente aunque siempre necesita de la cooperación multilateral de
b) A pesar de los esfuerzos por preservar la seguridad humana se han multiplicado las amenazas y la falta de coordinación entre las Organizaciones internacionales y los Estados que se preocupan más por su soberanía y sus intereses nacionales y no colectivos, han echado a perder mucho esfuerzo. Hace falta mejorar las instituciones internacionales y mejorarlas y traerlas a nuestros tiempos adaptándolas a las nuevas necesidades de la seguridad humana. Una amenaza contra uno es una amenaza contra todos, y por lo tanto la actuación colectiva es el mejor paso para un mundo mejor.
c) Vivimos desculturalizados y viciados por los medios de comunicación de masas que impactan sobre nosotros con espectáculos de guerras que dificultan los servicios humanitarios. El Derecho internacional humanitario se ve cada vez con más dificultades por preservar el orden en los nuevos conflictos, sobre todo en los Estados fracasados; sin embargo sigue con sus principios de imparcialidad, neutralidad… y ayudando y salvando vidas día tras día poniendo en riesgo su integridad sin importancia alguna.
d) El “uso de la fuerza” está regulado en
e) Los problemas medioambientales son conflictos sociales porqué movilizan políticas que endurecen los proyectos de los países como con el cambio climático y provoca desastres verdaderamente devastadores. ¿Está preparada la humanidad para afrontar algo así? Depende de los planes y proyectos preventivos que tenga para asegurar globalmente la seguridad humana.
f) El terrorismo transnacional no es la única amenaza importante, pero sí una de las más relevantes. Ya no sólo existe un trasfondo religioso o político sino que ahora va a hacerse contra más daño mejor y en el punto más débil mejor, pero también se busca dañar los puntos estratégicos más importantes para demostrar que están ahí y que siempre van a ser un poder capaz de hacer mucho más daño que el país más poderoso del mundo, la prueba está en el 11-S.
g) La economía ha sido un instrumento de Occidente para servirse de las deudas sobre los países en vías de desarrollo y encima existe la corrupción de la política en dichos países pobres que se quedan con todo el dinero excluyendo a la población de obtener beneficios. Las desigualdades económicas y el nivel de renta son motivo para conflictos armados pero también es demostrable que los terroristas pertenecen tanto a clases marginales como a clases ricas.
h) Cuando los Estados no quieren o no pueden proteger a sus ciudadanos necesitan de la ayuda de
i) La seguridad humana ha de estar basada en un Derecho internacional que pueda ser entendido como el ordenamiento jurídico de
Creo que es una obra completísima que aborda muchos temas aunque me quedé con ganas de saber más sobre algunos conflictos como los medioambientales, los Estados Fracasados, el terrorismo internacional, o la posición política norteamericana,… pero francamente es una obra que me ha encantado.
Dentro de la astrología, el signo zodiacal de Géminis es aquel que rige a las personas nacidas entre el 21 de mayo y el 21 de junio. Este signo es del conjunto del elemento aire: livianos, amistosos, comunicativos y joviales. Representa la dualidad del ser y la juventud, por lo tanto los nacidos bajo este signo tienen un carácter jovial, y por eso mismo también pueden parecer inmaduros en ciertas ocasiones.
El equivalente de Géminis dentro de los Dioses Olimpicos es Hermes, o Mercurio en la mitología romana. Dios de los viajes, de la literatura y de los poetas, del comercio, los caminos y la astucia de los ladrones, expresa las cualidades y los defectos de un Géminis, expertos en las tertulias y el comercio. Igualmente se representa por el signo del siervo en la astrología de los indios americanos. Los géminis se caracterizan por su gran capacidad de comunicación tanto de forma oral, escrita o artística, suelen ser cambiantes en su modo de opinión, carácter y suelen ser inseguros. Por esto último algunos son considerados como infieles pues representan la dualidad del ser. Aunque no se puede determinar exactamente su modo de ser debido a que son muy cambiantes (igual que el aire) se pueden determinar de ellos lo siguiente: buenos comunicadores, poetas, casanovas, fluidos, juguetones, infantiles y poco capaces de ver en momentos oscuros. Se deprimen en varias ocasiones generalmente sin motivo. la pareja ideal de géminis pues será alguien que comparta sus gustos y metas al igual alguien que le permita demostrar su propio ser.
Compatibilidad
Compatible: Aquario, Libra y Sagitario Géminis
Moderadamente compatible: Aries, Tauro, Cáncer, Leo, Escorpio y Capricornio
Incompatible: Virgo y Piscis
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