A veces... bueno siempre ocurren circunstancias que impiden a uno hacer lo que realmente quiere... y es que en sí todo consiste en alcanzar metas constantemente, muchas veces quiera uno o no, y el no conseguirlas pues nos da fuerzas para poder continuar aspirando a las siguientes, o bien puede hundirnos...

La vida cada día es más difícil y no porqué en sí uno vaya complicándola, ¡no!... , sencillamente porqué es necesario que uno se exija más de sí mismo dada la imparable competencia que existe entre las personas.

¿Les ha pasado alguna vez que no han sabido qué hacer con sus vidas pero igualmente siempre ha habido una persona, como un padre, que lo ha visto todo clarísimo diciendo por ejemplo que si uno no va a la universidad tiene pocas oportunidades de llegar a ser alguien el día de mañana? Bueno, quizás el caso no fuera así, pero se me ocurren muchísimas situaciones distintas teniendo que ver con alguien que sencillamente cree saber mejor que uno mismo que le conviene en la vida.

Pues en eso quería destacar al menos el pensamiento de hoy... en el hecho de que continuamente uno se va a encontrar con que hay personas que, gratuitamente, muchas veces dan su parecer pero es eso, s-u p-a-r-e-c-e-r... Si las personas al menos intentaran por un segundo ponerse en el lugar del otro... Hay muchas maneras de hacer ver a una persona que se está equivocando y no por ello emplear las típicas frases correctoras que usaría un padre megaprotector o las tan odiosas palabritas de no diré que no te lo advertí.... o también, si me hubieras hecho caso, quizás ahora... A todas estas personas les mando un mensaje: ¡Basta ya!

Cuando alguien quiere una opinión la pide... cuando alguien necesita de un consejo lo pide... qué se yo... Es bueno estar ahí siempre para lo que haga falta, pero es que no siempre hace falta... ¿Recuerdan aquéllo que decían Timón y Pumba en la película El Rey León de Hakuna Matata? Pues apliquénlo.

Y al resto sencillamente decir que bueno, que pasen de todo un poco... Es inevitable, como les cuento, que la gente vaya diciendo qué es mejor para los demás... y muchas veces sin pensar si con lo que dicen, o como actúan... actúan o dicen correctamente... Por eso, simplemente utilicen el síndrome del cabezón, que muchas veces oye pero no escucha... porqué trae de los cabezones a los demás...

La vida es más sencilla que todas las discusiones, problemas, averías, trastornos, altibajos, baches, inseguridades, conflictos, guerras, pleitos... La vida se resume en conseguir pequeñas metas que le hacen a uno ser feliz... unos lo serán aprobando un examen, otros simplemente con pasar un rato con la gente que quieren, otros lo serán estando de farra con los amigos la noche del sábado,... Así que aprendan a escucharse y dejen que el resto venga sólo... Porqué siempre es tiempo de pasarlo bien.


Hasta otra,




El Ángel Guardián